Aviso a navegantes: Suspensión de pagos - Concurso de acreedores

Es importante saber que, cuando nos hablan, leemos u oímos las palabras Suspensión de Pagos o Concurso de Acreedores, qué supone en cuanto a la supervivencia de la empresa y  qué efecto puede tener sobre los trabajadores de la misma.

Son términos que indican desequilibrios financieros que hacen peligrar la vida de la empresa. Como sabéis, la situación de una empresa se refleja en el balance, que no es otra cosa que una foto fija, económica, en un momento determinado en el tiempo. Se refleja en dos formas de ver la misma información.  Por un lado se muestra cuál es la estructura económica, llamada Activo. Sería verlo desde el prisma de, qué es lo que posee la empresa y cuál es su valoración económica. Sus inmuebles, su maquinaria, las materias primas, productos terminados, deudas que tienen los clientes con la Compañía, cantidad de dinero en bancos, efectivo que se tenga en caja. 

El Pasivo observaría las mismas cifras, pero desde el punto de vista de la estructura financiera. Esto quiere decir que, todo lo que hemos visto en el Activo, si cambiamos la forma de verlo, tendría su reflejo analizando cuál es la procedencia de los recursos que han permitido que esos inmuebles, esas máquinas, las materias primas, las deudas que tienen contraídas los clientes con la empresa, etc. puedan estar a disposición de la empresa. Hay que analizar cuánto han sido por aportaciones de los socios y beneficios que se han ido acumulando, cuánto es debido a deudas a largo plazo y qué cantidades debemos devolver a corto plazo. 

Lo lógico es que las aportaciones de los socios y deudas contraídas  a largo plazo se hayan aplicado a elementos que podríamos llamar permanentes. Inmuebles, maquinaria, vehículos, pero también, para mayor desahogo de la empresa, a parte de los elementos que son objeto de venta de la Compañía y facilidades de pago a clientes. Materias primas, productos en fase de fabricación, productos terminados, pagos a plazos a clientes.

Al exceso de  los recursos financieros, con carácter de largo plazo,  que se aplican al llamado Activo corriente (existencias, clientes, banco y caja), se le denomina Fondo de Maniobra, o también, Fondo de Rotación.

Este es el elemento fundamental para definir la Suspensión de Pagos y Concurso de Acreedores.

Una mala temporada en ventas, un incremento en el número de impagados por parte de los clientes, o una situación tan extraordinaria como la actual en que las ventas se han visto reducidas drásticamente, pueden hacer que el Fondo de Maniobra sea negativo. Esto quiere decir que, el funcionamiento habitual de la empresa, se esté financiando con deudas que la empresa tiene contraídas a corto plazo y, por lo tanto, de mantenerse en el tiempo, se puede llegar a una suspensión de pagos por no disponer de liquidez para atender sus compromisos.

Esta situación requiere una intervención judicial y el sometimiento a un procedimiento legal llamado concurso de acreedores