FRANCISCA DE PEDRAZA – EL MALTRATO EN EL S. XVII

Francisca de Pedraza (Alcalá de Henares (Madrid). Finales siglo XVI - Principios siglo XVII) de origen humilde fue una mujer que sufrió y padeció de malos tratos de palabra y obra por parte del que fuera su marido Jerónimo de Jaras y que consiguió que la justicia lo reconociera en 1624.

Fue una mujer maltratada que decidió no callarse por lo que denunció a su marido, consiguiendo una sentencia pionera y que sirvió de ejemplo a muchas otras mujeres. Una historia escrita en letras de discriminación y sometimiento, por cuanto el tradicional papel de la mujer era el de un ser secundario y sometido al varón.

Criada en un convento por ser huérfana de padre y madre salió del mismo para casarse con el pleno convencimiento de que al lado de aquel hombre podría desarrollarse como mujer, como esposa y como madre, pero nada más lejos de la realidad. Una realidad que la vino a demostrar, una vez más, cuan cruel era la vida y el destino de las mujeres en aquella época en España que no era otro que el del matrimonio o el convento, dentro de un mundo construido por hombres y para hombres.

Tras años de malos tratos, decidió cierto día poner fin a su suplicio, habiendo descartado el suicidio o la huida por temor a dejar un futuro incierto a sus hijos, fruto de las violaciones y palizas a las que fue sometida. A causa de una esas palizas, perdió a otro hijo que esperaba.  Así que por todo ello intentó acabar con todo eso acudiendo a la justicia desprovista de su intimidad, de su jubón y mostrando las múltiples muestras que la crueldad de su marido había dejado en su rostro y en su cuerpo. 

Primero acudió a la justicia ordinaria (1619), donde le dijeron que debía acudir a la eclesiástica (1620 y 1622) y en que la sentencia de esta recomendaba al marido que fuera honesto y considerado con la demandante y no le hiciera semejantes malos tratamientos. Pero las “recomendaciones” eclesiásticas no surtieron el efecto deseado para Francisca ya que, al llegar a casa, Jerónimo le propinó tal paliza por chivata que la dejó medio muerta.

Pero un buen día se la encendió una luz y acudió a la justicia universitaria hasta conseguir en 1624 de la jurisdicción universitaria (rector Álvaro de Ayala) una sentencia de divorcio y la devolución de su dote, además del equivalente a una orden de alejamiento. Lo que ha sido considerado como un precedente histórico de la actual lucha contra la violencia de género.

                                Premio Francisca de Pedraza contra la violencia de género

Fuentes. Wikipedia - El País - El Mundo - Dream Alcalá - Alcalá hoy - Mujericolas - Mielost