Diferencia en hidratar, exfoliar y limpiar la piel

El cuidado facial y la limpieza diaria de nuestra cara es una rutina diaria y obligatoria no solo para lucir un rostro luminoso y tener un correcto mantenimiento de la piel, también nos ayuda con la eliminación de impurezas y células muertas. Para conseguir todo lo anterior tienes varias opciones: exfoliación, hidratación y limpieza. Pero, ¿realmente son lo mismo o no? Para aclarar estas dudas, hoy os vamos a hablar de las diferencias entre hidratación, exfoliación y limpieza.

Cada persona y cuerpo son totalmente diferentes y lo que puede servirte a ti igual no le vale a otra persona. Sin embargo, existen unas normas de maquillaje y limpieza básicas que debemos conocer y aplicar para eliminar todas las impurezas y cuidar nuestro cutis. Pero conocer estas reglas también implica el conocimiento de nuestro propio cuerpo y piel.

Lo primero que tenemos que saber es aprender a distinguir la clase de piel que tenemos, mixta, seca o grasa. De esta forma, podremos aplicar el sistema que mejor se adapte a nuestra rutina de limpieza, pero sobre todo a nuestra piel. Para distinguir la piel seca, mixta y grasa sigue estos consejos:

• La piel grasa y la cara presenta un aspecto brillante y aceitoso a consecuencia de la mayor cantidad de sebo producida por la piel.
• La piel mixta suele presentar impurezas en la frente, nariz y barbilla, es decir, la zona T de la cara. Asimismo, las mejillas están más secas de lo normal y el resto de la cara tiene un brillo grasiento aunque hay zonas con una combinación de ambos tipos de piel (seca y grasa).
• La piel seca tiende a picar y presenta un aspecto árido y áspero. Esta clase de piel es más sensible a los cambios de temperatura, por lo que hay cuidar especialmente la hidratación cada día.
• La piel normal es más elástica que las otras dos, tiene una tonalidad más rosada y cuenta con poros más pequeños. El color rosa es a consecuencia de la buena circulación en el rostro que afecta a la elasticidad y el buen color de la piel.

Además, tampoco debemos olvidar la época en la que estamos ya que el calor, el frío y la temperatura no es la misma en verano que en invierno. Hidratar la piel en verano es algo obligatorio, aunque algunas pieles deben tener más precauciones que otras, en especial, las pieles secas que son más susceptibles en estas fechas de extremo calor.

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