Carta a los Reyes Magos

Queridos Reyes Magos:

Espero no estar escribiendo esta carta demasiado tarde. No suelo ser persona de dejar las cosas para el final, pero reconozco que esta vez me ha pillado un poco el toro.

Podría empezar diciendo que el año pasado fui muy buena, pero creo que no me corresponde a mí decirlo, así que me limitaré a mencionar el artículo 23 de la Declaración Universal de Derechos Humanos:

Sí, lo habéis adivinado. Este año, en lugar de la habitual bicicleta, el iPhone o la tablet, me gustaría pediros un trabajo.

Hay muchos tipos de trabajos, pero a mí me gustaría que me trajeseis uno que me haga sonreír cada mañana.

Un trabajo donde haya buen ambiente, donde nos recibamos intercambiando sonrisas, donde valoren mi experiencia y mi carácter, donde no se dejen llevar por las primeras impresiones que pueda causar una fecha de nacimiento.

Deseo un trabajo en una empresa seria, no una que me quiera como un kleenex de usar y tirar. Una empresa que valore a las personas y que las considere un activo, no un gasto a soportar. Una empresa en la que hacer bien las cosas no sea "reconocido" con un despido a los diez años o a los dos meses, sino con posibilidades de crecimiento o al menos con la tranquilidad de saber que siguen contando con una.

Me gustaría tener un trabajo con compañeros o al menos un trabajo en el que deba tratar con personas. Por favor, no volváis a traerme uno de esos trabajos en los que te encierran en una oficina oscura y lúgubre en la que ni el contacto con otra mirada es posible.

El sector me da igual. Ya sabéis que el campo en el que más he trabajado es el de la formación, pero no es cosa mía el haberme encasillado; en este país son pocas las posibilidades que hay de cambiar de sector. No obstante, si me dejáis elegir, me gustaría un trabajo con un trato personal cercano y en el que pudiese ayudar a la gente. ¿Qué tal un puesto como orientadora laboral? A mí me encantaría.

También me gusta trabajar con letras. Los números se me dan fatal, pero entre letras me desenvuelvo como pez en el agua. Pero, porfa, letras y personas. No me dejéis sola con las letras todo el tiempo, ¿vale?

Otra cosa que también puede incluir ese trabajo es tecnología. Ya sabéis que me apasiona internet, las redes sociales y cacharrear con el ordenador.

No creo estar pidiendo demasiado y, en todo caso, no pido nada que yo no dé: compañerismo, buen humor, formalidad y buen hacer.

De todos modos, si os resultara más sencillo, no me importaría que cambiaseis ese trabajo por un buen premio en la lotería 😂.