Un ladrón de guante y caballo blanco. El Duque de Lerma

Fantástico cuadro de la mano del genial artista Pedro Pablo Rubens. Este cuadro fue realizado por el  pintor siendo joven y no excesivamente conocido, por eso, es de los pocos cuadros de Rubens que están firmados.

 El personaje transmite honorabilidad, magnificencia, poderío, valentía. Nada más lejos de la realidad. Estamos frente a uno de los personajes más habilidosos y ladrones de la historia de España, el Duque de Lerma. 

Francisco de Sandoval y Rojas o, "El niño del pelotazo". Este noble, seguro que tenía todo un Master por la Juan Carlos I en lo tocante a cómo sacar tajada de la realeza. Ya sus antepasados habían estado al cuidado de desequilibrados reales como Juana la loca o el príncipe Carlos, Hijo de Felipe II, y del cual fue paje. Además, tuvo la suerte de estar cerca de un rey irresoluto cuyo  padre dudaba de sus capacidades y que se quejaba amargamente a su gente más cercana comentando "temo que me lo van a gobernar".

Al parecer, ya se le veía venir a don Francisco de Sandoval. Fue el propio Felipe II el que intentó alejarle de España ofreciéndole un virreinato en América, algo a lo que rehusó. Una vez fallecido Felipe II, éste llegó a tener más poder que el propio rey, no tenéis más que ver el cuadro de Rubens mostrando el descaro del duque al aparecer a caballo y con bengala (bastón de mando cilíndrico), algo exclusivo para reyes. Claro que, ya que abrió brecha, el Conde Duque de Olivares tiene otro retrato a caballo, esta vez su autor es Velázquez en igual situación, pero mostrando la grupa de la montura.

A lo que íbamos. Al tener más poder que el mismo rey, situó en los principales puestos de la corte a su familia y amigos. Hermanos, primos, hijos, sobrinos, hasta un cuñado. Como no encontraba suficientes obstáculos a su proceder, ideó lo que podríamos traducir en el ámbito de Hollywood como "El Golpe" o mejor aún, "El Gran Pelotazo". 

En los planes del duque, como paso previo, estuvo la compra de edificios y suelo en Valladolid, una vez que tenía casi convencido al rey. La noticia del traslado de la corte a la ciudad castellana hizo elevar el precio del suelo, lo que supuso unos beneficios enormes para el duque. Uno de los argumentos que utilizó era que Madrid no gozaba de las condiciones higiénicas necesarias como corte. El traslado se realizó en 1601 y afectó a 40.000 personas, que para la población existente entonces era una multitud.

Una vez instalada la corte en Valladolid, el avaricioso de Paco volvió a pergeñar el mismo movimiento, pero a la inversa. Durante seis años fue comprando terrenos y palacios devaluados en Madrid debido a la pérdida, años antes, de la condición de ciudad de la corte. En 1607, utilizando el mismo argumento, para qué romperse la cabeza, vuelta de la corte a Madrid y crecimiento vertiginoso de los precios y, por supuesto de los beneficios del Duque de Lerma. Ni qué decir tiene que, Valladolid quedó arruinada y con gran cantidad de edificios sin terminar. 

Tales teje manejes ya no pasaron desapercibidos y la cosa comenzó a ponerse muy fea para el arrogante y avaro de Francisco. Tan insostenible debió de ser su situación que, rogó al Papa que le nombrase cardenal, ya que los religiosos gozaban de inmunidad. El Papa accedió, imagino que con oro por delante, librándole de la horca. Debido a ello, en Madrid, pueblo muy de sacar coplillas, se escuchaba

                                                               Para no morir ahorcado

                                                            el mayor ladrón de España

                                                                 se viste de colorado.

Como alguien tenía que pagar las culpas, un colaborador del duque, Rodrigo Calderón, el valido del valido, pagó con su vida. Para evitar que le imputaran, muy en boga en estos tiempos, Rodrigo Calderón fue en persona a Valladolid a eliminar pruebas y, en esas, le pillaron. Este valido sub2 se enriqueció igualmente y, de lo poquito que podemos decir de él es que, gracias a su gusto por la pintura, en el Museo del Prado tenemos uno de los lienzos más expectaculares de Rubens, La Adoración de los Reyes, cuadro en el que el mismo pintor aparece retratado.

¿y de esta situación el pueblo pudo sacar algo positivo?. Se dice que hay que buscar el lado positivo de toda situación. ¡Os aviso! hay que ponerse muy positivo. La Hacienda Española ingresaba 10 millones de ducados, ducado arriba, ducado abajo, y la deuda del Estado ascendía a alrededor de 70 millones de ducados.  El ejército de Flandes precisaba de 300.000 ducados mensuales. ¡Os acordáis del famoso General Spínola!, el de la Rendición de Breda de Velázquez!